-Estreno: 6 de junio de 2013, USA
-Drama, 42 minutos, 3 temporadas, 38 episodios.
-Terminada.
-El que una nueva serie empiece en la cadena USA es la confirmación anual definitiva de que se acerca el verano en la tele. De hecho, su estilo de televisión se suele apodar como "blue skies programming", una programación de cielos azules y series relajadas, con mucha gente guapa, poca ropa y marco incomparable, donde el ser policía o abogado o médico no significa que no puedas desestresarte en traje de baño un rato en cada episodio. En este caso, la serie, de los creadores de 'White collar', trata sobre una casa grande en la mismísima playa californiana, requisada a un delincuente (apodada "Graceland" porque a su dueño le molaba Elvis Presley), y que ahora varias agencias contra el crimen usan como piso franco para operaciones de incógnito. Así, tenemos a seis agentes diferentes del FBI, la DEA y el Servicio de Aduanas ayudándose unos a otros a proteger sus identidades secretas, perseguir a mala gente, hacer surf y hogueras nocturnas en la playuqui al final del día, y cocinar en gayumbos con resaca mientras leen el correo. Y obviamente, las dos agentes femeninas están como trenes, aprovechando muy bien la excusa de que es que tienen que atraer a sus objetivos de alguna manera. Al parecer, esta idea tiene una base más o menos real en cuanto a lo de la casa-en-la-playa-requisada-y-compartida, pero luego la serie se monta su propia historia a partir de ahí. Algunos elementos de los guiones están un poco mejor que la media, sobre todo cuando no se trata de casos de usar y tirar, y Daniel Sunjata, ex de 'Rescue me', tiene madera de "leading man" intenso y guapetón, pero la cosa no pasa de entretenimiento sin más. Como dijo la crítica norteamericana, no es 'The wire' ni 'Breaking bad' (ni 'The shield', a pesar de tener a Jay Karnes como secundario), pero tampoco te hará querer pegarle un tiro a la tele.
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